No existe un sistema, o forma que sea “a prueba de errores” para poder
encontrar un centro de adiestramiento canino que nos satisfaga en todos los
aspectos. Si es por encontrar defectos, el ser humano se las pinta solo para
conseguirlo. No es intención de ser grosero, pero esto es así, no podemos
negarlo, está en nuestra naturaleza. Para ello lo único que debemos hacer,
cuando hemos llegado a la conclusión de que necesitamos acudir a uno que nos de todo lo que necesitamos, es ser
objetivos con lo que nos vayamos encontrando, y seguir unas pequeñas
directrices, que vamos a dar desde aquí para que, con suerte, podáis encontrar
un centro de adiestramiento que os satisfaga tanto a vosotros, como a vuestra
mascota, y cumpla con los requisitos mínimos,
para cubrir vuestras necesidades.
Hay que tener claro que encontrar el mejor centro de adiestramiento para
nosotros y nuestro perro, es para la mayoria, una de las cosas más importantes, y más difíciles
de realizar, ya que desconocemos que nos podemos encontrar en el proceso. Y es
normal que esto no preocupe enormemente hasta el punto de que pidamos consejo a
un amigo, o busquemos en un blog dedicado a el adiestramiento canino, como es
tú caso, para encontrar un poco de luz en este enturbiado asunto. No
desesperes, ya que no es tan complejo como la gente suele pensar. Solo es
recomendable fijarse en unos pocos detalles, o directrices, para estar seguros
de que un centro de adiestramiento posee lo que necesitamos.
1.- Experiencia en
el sector de la Educación canina.
- Es muy importante que el adiestrador/es tenga en primer lugar su titulación
en regla como adiestrador canino acreditado (si no la tiene, no es adiestrador), exhibiendo
dicha credencial (lo normal es que esté colgada en una pared a la vista de todo
el que entre, o en un despacho del centro) si así se solicita, y en segundo
lugar, y no menos importante, que posea experiencia en el adiestramiento
canino. Esto no hay que confundirlo jamás con el tiempo que lleve en
funcionamiento un centro de adiestramiento, ya que es el adiestrador el que
realmente enseñará a nuestro perro. Es motivo de confusión este hecho, que nos
hace pensar que si un centro de adiestramiento fue fundado hace muchos años, o
tiene un nombre muy conocido, va a tener mejor resultado en un adiestramiento
que otros, cuando realmente es la veteranía, y experiencia del adiestrador experimentado, lo
que debemos tener en más estima.
2.- Adaptabilidad en el adiestramiento.
- Hemos de entender un concepto muy claro. Al igual que no existen dos
personas iguales, tampoco existen dos perros iguales. Es por esto, que es el
adiestrador el encargado de buscar la mejor manera, la más adecuada para
nuestro perro, de adiestrarlo en base a las cualidades, y defectos que el
animal pueda poseer. Los centros de adiestramiento que poseen, y en muchos
casos utilizan de forma publicitaria, un solo sistema, o método, aludiendo a
que es infalible, o el más adecuado para todo tipo de perros, no son
recomendables.
- El adiestramiento no solo es práctica, también exige de teoría. Un buen centro de adiestramiento ha de tener, además de una amplia zona para el adiestramiento práctico de nuestro perro, zonas habilitadas para la impartición de cursos, o seminarios periódicos, relacionados con el cuidado, costumbres, enfermedades, alimentación, etc. del perro, y el adiestramiento canino. Ofreciendo a los socios del centro de adiestramiento, unas bases teóricas que fundamenten los conocimientos, y que se puedan combinar con actividades prácticas, para desarrollar las habilidades adecuadas de nuestro perro. Así la formación será más completa para los alumnos, tanto humanos, como de cuatro patas.
4.- Temario completo, y actualizado.
- En combinación con el punto anterior, los cursos, y seminarios
impartidos por un centro de adiestramiento, también han de ser actualizados, y
revisados, para poder ofrecer la mayor cantidad de mejoras relativas al
adiestramiento de nuestro perro. Esto es también un indicativo claro de que el
centro de adiestramiento intenta aprender, y estar al día de las nuevas
enseñanzas impartidas por otros expertos en la materia, lo que indica un claro
intento de ofrecer el mejor servicio a los socios-alumnos.
- Es muy recomendable que nuestro centro tenga acuerdos con otros centros
de adiestramiento, asociaciones, o empresas del sector para ofrecer mejores
condiciones, o la mejor calidad en la formación. También es recomendable que
exista la participación, o aportación de ponentes destacados en los cursos, o
seminarios que oferten, como personal de grupos de rescate y salvamento, o
especialistas en el adiestramiento canino, tanto en estamentos estatales, como
internacionales.
- No solo es aconsejable que un centro de adiestramiento imparta cursos, y seminarios, si no que también es muy aconsejable que posteriormente haga un seguimiento a los alumnos que han recibido dichos cursos, prestando apoyo informativo, bien en el mismo centro, o por medio de paginas Web, permitiendo esclarecer cualquier duda que no se haya resuelto durante los cursos, y que se haya presentado durante el proceso de adiestramiento en cualquier lugar fuera del centro. Estos medios modernos de comunicación son hoy día muy importantes tanto para el adiestrador como para el alumno, ya que permiten una comunicación muy eficaz ante cualquier eventualidad, y permiten al alumno, además, poder expresar sus conclusiones en un medio que permita a otros dueños, quizás menos experimentados, aclarar conceptos, y dudas que pudiesen surgirles durante sus primeros comienzos.
7.- Adecuada relación calidad / precio.
-Sin duda alguna este es uno de los requisitos
que más tendremos en cuenta. Si bien el precio puede variar de un centro a
otro, sin duda hemos de tener en cuenta las ventajas de todas las prestaciones
que el centro nos posibilite, aunque no hagamos uso de ellas. También deberemos
observar que sean claros con las condiciones de pago, y detallados en los
recibos. En el caso de los posibles cursos, o seminarios recibidos, se nos
debería hacer entrega de una titulación, o diploma correspondiente, que
acredite la superación, o participación en dicha formación. Por supuesto, no
debemos exagerar con nuestras expectativas. Si bien muchos cursos tienen
validez nacional (obviamente son más caros) la mayoría de cursos, y seminarios
son a titulo interno, impartidos y sostenidos por el mismo centro, y no tienen
validez más allá de simplemente informativo. Aun así, debemos asegurarnos que
posea el sello del centro, que es el reconocimiento de haber superado el curso,
y mejor si lo respalda alguna institución. Todo en su justa medida.
- Contar con las opiniones de antiguos alumnos del centro de adiestramiento,
para valorar la idoneidad del mismo, es algo muy recomendable. Al igual que no
solemos hacernos socios de un centro, de la índole que fuese, que haya recibido
quejas, o en el que sus socios estén disgustados, tener en cuenta las alabanzas
de los que ya han utilizado los servicios de un centro de adiestramiento,
también es una buena idea. Esto es lo que comúnmente se conoce como el “boca en
boca”, el cual se podría extender también a medios digitales.
9.- Reconocimiento
publico.
- Es
también un distintivo importante, los meritos que se hubiesen podido conseguir
por los miembros del centro, para acreditar la valía del mismo. Es comprensible
entender que llegar a un centro de adiestramiento, en el que se nos presenta
nada más entrar, una enorme vitrina llena de copas, medallas y diplomas, es una
clara muestra del reconocimiento oficial que existe del mismo. No solo es
ostentación, si no que además es una prueba física de los meritos reconocidos
por otros profesionales del adiestramiento canino, y por las autoridades que
hicieron entrega del galardón expuesto. Está de más volver a repetir, que
dichos galardones fueron conseguidos por los adiestradores, que son, siempre,
la columna vertebral de cualquier centro de adiestramiento.
10.- Entorno para el
adiestramiento.
- No solo
es importante el precio, o los diplomas cuando buscamos un buen centro de
adiestramiento para nuestro perro, si no que debemos considerar todo lo que
esté relacionado con el ambiente de trabajo que existe en el centro de adiestramiento.
Y este es, pese a que lo haya puesto el último, una de las cosas más
importantes a tener en cuenta. Hemos de entender que existen varios aspectos
cuando hablamos del ambiente de trabajo en un centro de adiestramiento, que
pueden ser relevantes a la hora de decidirnos por uno en particular. Es muy
importante considerar que ambientes de trabajo son idóneos para poder realizar
un adiestramiento canino de la forma adecuada. Si bien existen muchas cosas a
tener en cuenta, aquí solo expondremos tres tipos de ambiente de trabajo NO
recomendables.
-El primero podríamos llamarlo “inconvenientes externos”, y
podríamos denominarlos como todos aquellos que influyen, y generan dificultad
en el adiestramiento desde el exterior del mismo, como carreteras con mucho
trafico, obras, empresas muy ruidosas o que generen polvo, etc. Estos centros
han de evitarse, ya que no solo distraen al perro, si no también al
adiestrador, y a nosotros mismos, y no permiten una asimilación adecuada de las
técnicas de adiestramiento.
-Al segundo tipo lo denominaremos como “aglomeración
masiva”, y se produce cuando se masifica una clase lectiva, ya sea teórica o práctica,
lo que imposibilita la correcta evolución del proceso de aprendizaje, y
dificulta enormemente que los adiestradores realicen su trabajo
convenientemente.
- El tercer tipo es obviamente algo que no hace falta que
nos expliquen como es, y al que no voy a poner ningún nombre concreto, ya que
se refiere al centro donde el personal no esta en demasiada “sincronía”, por
decirlo finamente. El personal de un centro de adiestramiento, en verdad, de
cualquier centro docente de la índole que fuese, ya fuesen educadores o
administrativos, no pueden, jamás, dar muestras de enemistad por la naturaleza
misma del lugar en el que se encuentran. Como me dijo un amigo mío hace tiempo,
si quieres pelearte, se boxeador, no maestro.
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